Ciudad de México, 12 de noviembre de 2025 (SNRP).– Durante años, el ejercicio periodístico en México ha estado marcado por estadísticas alarmantes derivadas de las agresiones constantes perpetradas por el crimen organizado, autoridades, actores políticos y otros grupos que buscan acallar la libertad de expresión. Este clima de violencia ha obligado a numerosos comunicadores a recurrir a la autocensura, particularmente en la cobertura de temas relacionados con seguridad, corrupción e impunidad, a fin de preservar su integridad física y emocional.
En un país clasificado por organizaciones internacionales como la Federación Internacional de Periodistas, entre los más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, el Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP) considera urgente que las autoridades actúen con celeridad y eficacia para garantizar condiciones seguras para quienes informan.
Exigencia de Protección y Justicia
El SNRP denuncia la necesidad inmediata de protección para los periodistas que han sido víctimas de amenazas e intimidaciones en distintas entidades del país durante noviembre de 2025.
A través de este pronunciamiento, la organización exige a las autoridades judiciales federales y estatales adoptar medidas efectivas que permitan a los comunicadores ejercer su labor sin temor, visibilizando además un patrón sistemático de ataques que vulnera la democracia y el derecho ciudadano a la información.
Casos Recientes
1. Morelos (Cuautla)
El periodista Francisco “Paco” Cedeño, con más de 50 años de trayectoria y conductor de El Barbas Noticias, presentó denuncia formal ante la FGR y la FGE de Morelos (carpeta FIDAI/707/2025) tras recibir una amenaza directa del crimen organizado.
El 10 de noviembre se localizaron restos humanos y una cartulina intimidatoria dirigida a él en Cuautla. Cedeño, conocido por su cobertura crítica sobre corrupción y seguridad, ya contaba con medidas de protección federales, las cuales fueron reforzadas tras el nuevo incidente. En un mensaje difundido en redes sociales, pidió calma y reiteró que su labor se limita a informar los hechos.
2. Baja California (Tijuana)
La directora del Semanario ZETA, Adela Navarro Bello, fue intimidada por el empresario Manuel Cisneros Romero, quien acudió armado a las oficinas del medio el 1 de noviembre, acompañado de escoltas y blogueros.
Exigió pruebas sobre una publicación del 31 de octubre que vinculaba a su hijo con actividades ilícitas, profirió amenazas verbales y reveló públicamente la dirección de Navarro. La periodista presentó denuncia ante la Fiscalía de Baja California, subrayando la gravedad de estos actos en una de las regiones más peligrosas para la prensa.
3. Michoacán (Uruapan y Morelia)
Entre el 1 y 3 de noviembre, los periodistas Martha Lucero Díaz Estrada, Alfredo García Callejas, Ezequiel Pulido y Sabas Razo recibieron amenazas y hostigamiento digital en grupos de WhatsApp, con mensajes que incitaban a la violencia física y destrucción de sus viviendas.
Los ataques ocurrieron tras la cobertura del asesinato del alcalde Carlos Manzo. Los comunicadores notificaron al Mecanismo Federal de Protección y a la Fiscalía de Michoacán, y solicitaron reforzar las medidas de seguridad.
4. Michoacán (Morelia)
La periodista Dalia Villegas Moreno, de Quadratín Michoacán y ContraMuro Noticias, fue agredida físicamente el 2 de noviembre durante la cobertura de una manifestación en el Palacio de Gobierno.
El secretario de Seguridad Pública estatal, Juan Carlos Oseguera Cortés, le arrebató su teléfono y ordenó eliminar material periodístico, ocasionándole lesiones en el brazo. La reportera denunció los hechos ante la Fiscalía General de la República.
5. Michoacán (Morelia)
El reportero Rodrigo Emmanuel Sandoval Fernández, de PCM Noticias, fue sujetado con fuerza por el comandante Martiniano Pedraza, de la Guardia Civil, el 3 de noviembre, mientras documentaba presuntas detenciones arbitrarias.
A pesar de mostrar su acreditación, los agentes obstaculizaron su trabajo y lo intimidaron, alegando desconocer su labor periodística.
6. Estado de México
El periodista Arturo Espinoza denunció amenazas recibidas por su labor informativa. El 11 de noviembre confirmó que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México abrió una carpeta de investigación sobre el caso.
Agradeció la solidaridad de colegas y organizaciones, reiterando que “el periodismo no se intimida” y citando a Rodolfo Walsh: “El periodismo es libre o es una farsa”.
El hecho refleja el riesgo persistente que enfrentan los reporteros en regiones con alta incidencia de corrupción y violencia institucional.
Llamado Urgente
El SNRP condena enérgicamente estos actos de intimidación y exige a las fiscalías federales y estatales, así como al Mecanismo Federal de Protección a Periodistas, una respuesta pronta y efectiva.
La libertad de expresión no puede verse coartada por el miedo. Es indispensable actuar con determinación para proteger a quienes informan desde las zonas más peligrosas del país, como Morelos, Baja California, Michoacán y el Estado de México.
El sindicato hace un llamado a la sociedad civil, organismos internacionales y autoridades a sumar esfuerzos en defensa del periodismo independiente, recordando que un ataque a un periodista es un ataque directo a la democracia.
Comité Ejecutivo Nacional del SNRP
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